sábado, 1 de marzo de 2008

Mañana de un sábado gris

Manoteé el celular y tardé 45 segundos en encontrar el botón lateral que prende la lucecita (no sé cuándo me desacostumbré a simplemente abrirlo); 10:29am, no muy temprano si queremos estar en casa a la hora del almuerzo. A ciegas, porque la lamparita se quemó cuando traté de encenderla y este es un dormitorio hermético, me vestí con la misma ropa que anoche (puaj). Salí a la cocina: nadie. Me asomo al baño: puerta abierta y adentro... nadie. El dueño de casa sigue durmiendo y el día está nublado, fresco; vamos bien. Me da tiempo a despabilarme y tomar dos mates antes de levantarse con apuro por que nos vayamos; tiene que llevarle la guitarra nueva a su primito, que vive en mi cuadra; no hay tiempo de desayunar... y si llevamos el mate para el camino?

Ahí estábamos, esperando el subte, el paisano con la guitarra envuelta en papel madera y yo con el termo bajo el brazo: no se me ocurre nada que desentone más con el Alto Palermo que promueve la estación Bulnes. En eso nos llaman (a mi teléfono porque el paisano no tiene): 'Nosotros vamos a Monte Grande en el coche, los pasamos a buscar?', 'Dale, te esperamos en Cerrito y Diagonal Norte'

Creo que nunca había estado un sábado a la mañana en el centro. La combinación me resultó rara: la diagonal está vacía, se notan más los turistas, el tráfico es poco pero igualmente trastornado por la siempre presente marcha piquetera, un pasaje está abierto pero el otro no, las oficinas están cerradas pero hay muchos comercios abiertos, y la fuente, que prenden siempre que hay viento para que moje a todos los transeúntes, hoy está apagada. (Mejor, como ornamento es horrible y seca resulta un muy útil y amplio asiento.) A la fuente vamos!

Y así nos agarró el mediodía, húmedos en la fuente seca, entre extranjeros y manifestantes, estrenando el regalo de mi vecinito con 'The fool on the hill'... Mate, guitarra y Beatles frente al Obelisco. Y yo sin pilas en la cámara.

2 comentarios:

Escuadron del Gran monte dijo...

Al Escuadrón del Gran Monte le gusta mucho esa mezcla de costumbrismo urbano y sencillez minimalista que se desprende de tus textos.
Al leerlos es demasiado fácil sentirse en los lugares que describís.
Lindo, lindo.

AEZ dijo...

Apoyo al escuadrón. Por eso reclamo más. ¿O me va a decir que estando como usted denuncia, "siempre al pedo", no tiene un rato para escupirse algún textito?